Documento 16/12- 30 de marzo de 2012

DE “LA MAYOR” A SAN PEDRO, EN EL VATICANO

Autor: Araceli Segura Suárez


Un Sueño hecho realidad tras muchos años de esfuerzo gozoso, trabajo ilusionado y… también, por qué no? un poco de suerte bien merecida!!!

Recientemente, el Coro “Juan Hernández”, de BAZA, Granada, ha tenido la satisfacción de realizar una pequeña “gira” por la ciudad de Roma con gran maestría en el campo coral, a pleno rendimiento y… a pleno pulmón, para disfrute de todos: cantores, espectadores, comensales, viandantes, sacerdotes y embajadores. Gira llena de anécdotas, magnífica convivencia, recuerdos imborrables y, sobre todo, el cumplimiento del sueño que todo grupo coral tiene en su corazón y en su voz: cantar en el Vaticano y…cantar MUY BIEN.

El coro J.H. nació como agrupación polifónica parroquial allá por el año 1995 y bajo la batuta de Laureano Torres Torres, profesor de música, con dilatada experiencia como director y creador de coros infantiles y juveniles, a petición del entonces Arcipreste de la iglesia Colegiata de Baza, -“la Mayor” para los bastetanos- don J H.  En su curriculum hay actuaciones y reconocimientos, en Viena, Benasque (Concurso Internacional de Polifonía, Premio del público), Portugal, Premio Dama de Baza a la Cultura… y más de doscientas actuaciones por toda la geografía nacional.

Su director, Laureano, ha sabido sacar lo mejor de cada voz y ensamblarlas para que el grupo funcione a pleno rendimiento y conseguir, pasito a pasito, una serie de actuaciones que les han dado el suficiente prestigio, reconocimiento y experiencia para ser invitados  a cumplir su sueño, de “la Mayor” a San Pedro.

El 16 de marzo, dieron un concierto en el Pontificio Colegio Español, “San José”, de Roma, Italia, que fue estupendo y un magnífico broche para las celebraciones que se hacían en esa prestigiosa institución de estudios superiores religiosos. Se celebraba su santo patrón y los 50 años de su fundación. Todos los presentes, obispos, cardenales y sacerdotes o público en general, disfrutaron de perlas corales que Laureano y su coro desgranaron con gusto y buen hacer.  Y todo eso… después de un larguísimo viaje de casi un día y sin haber descansado!!! Aún quedaba lo mejor.

En los días siguientes y mientras la agrupación J. H. visitaba la ciudad de Roma, de forma espontánea y generosa, el coro  actuó en varios lugares para sorpresa y agrado de los que por allí estaban o pasaban; en el restaurante cuando reponían fuerzas, en una plaza para templar y engrasar la voz, en la Plaza de España ante la Embajada de nuestro país ante la Santa Sede que, bajo la bandera roja-y-gualda se arrancaron con un magnífico Granada que hizo temblar las paredes de tan histórico edificio y la Excelentísima Embajadora , Dª María Jesús Figa López – Palop, emocionada, dejó sus quehaceres para bajar a saludarles, hacerles los honores y volver a disfrutar de un grandioso bis. Y todos tan felices y esperanzados para la actuación estrella del día 19.

Y llega el día de San José, patrón de la Iglesia Universal, santo de tantos  componentes del coro y las emociones iban enredándose en cada uno de las voces  bajo una lluvia tímida y a ráfagas que hacía temer por algunas voces. Desde por la mañana y ya arreglados para su actuación de la tarde, el grupo entero y los acompañantes pasearon por el Trastevere, felices y temerosos ante el cumplimiento de su sueño, ilusionadísimos por su responsabilidad y con mariposas en el estómago y hasta en los pies…. acabaron en la Basílica de San Pedro donde, a las 5.30 de la tarde,  ofició una misa monseñor Angelo Comastri en la Capilla Mayor, el brazo transversal de la Basílica, detrás del Baldaquino, en la que concelebró el sacerdote español, antiguo miembro del coro y buen amigo  D. J. Francisco Serrano Granados.

En esta misa, el coro J.H. tuvo una actuación excelente junto al organista de la Basílica, con todos emocionados y dando de sí el alma en la voz, la ilusión cumplida en cada vuelo de mano del director del coro, en cada aspiración de aire para convertirlo en notas y así, entre música, espiritualidad y emoción…se llegó al final de un largo camino que, ahora, cumplido ese sueño, se abre en un abanico de esperanza para las futuras actuaciones. Ha valido la pena!!!

Seguro que San José disfrutó, los oficiantes de la misa, los asistentes a ella y, sobre todo,  los-as cantores, acompañantes y bastetanos que, casualmente pasaban por allí.

Hay que agradecer además, la invitación a cantar en el Pontificio Colegio Español de San José de D. Mariano Herrera Fraile, su rector, al ofrecimiento de D. José Francisco Serrano y a la conjunción de cosas que se resume en “estar ahí en el momento oportuno, con la persona oportuna” y el trabajo bien hecho pues, la suerte NO es de quién la encuentra sino de quién la busca y, el coro J.H. lleva muchos años trabajando para dar con ella.