Documento 42/12 - 31 de agosto de 2012

LA FERIA DE BAZA

Autora: María José Martín Gómez. Presidenta del Partido Popular de Baza; Concejala en el Excmo. Ayuntamiento de Baza y Senadora por la Provincia de Granada.


Un año más el principal punto de encuentro para los Bastetanos se acerca. Lo tenemos más que presente en nuestro quehacer diario. La Feria y Fiestas de Baza 2012 está aquí y con ella  nuestro Cascamorras y la tradicional y sentida frase: “¡Esto sí que es un Cascamorras!”. Porque ser Bastetano es verlo, disfrutarlo, sentirlo, correrlo, en definitiva, vivirlo todo, junto o separado, según el momento y según nuestras circunstancias personales y familiares.

Son días, horas, y momentos que compartimos con nuestros seres más queridos, amigos, familiares, conocidos y vecinos, donde disfrutamos de nuestra Feria, de día y de noche. Un año más… pero nunca igual al anterior. Porque cada año de Feria supone una experiencia bien distinta, y una etapa de nuestra vida que queda grabada por nuestras vivencias en la Feria y Fiestas de Baza.

Todavía recuerdo, y ahora con añoranza, la Feria en la Carrera de Palacio, Alameda y Plaza de las Eras. Una etapa de mi infancia grabada por el “algodón dulce” de la eterna mujer rubia ubicada entre el pub “Manila” y el Palacio de los Enríquez, los “caballicos” o el tradicional scalectrix, sustituidos más tarde por el “zig-zag”, el “módulo”, el “tren de la bruja” o los coches de choque “Valencia” y sus fichas amarillas, en una etapa posterior.

Los churros, el bingo o las tradicionales casetas entre los setos de boj de la Alameda, las chapas “colorás” de la Peña Taurina y el famoso “Tío Pepe” con su sombrero negro, que tanto nos llamaba la atención a los más pequeños, junto con su pañuelo rojo. Los tradicionales y azules puestos de turrones en los Caños Dorados y, colgando, las trompetas y los tambores por los que se nos iban los ojos. El concurso de tractoristas con los “flamantes y enormes vehículos” expuestos en la Alameda que nos dejaban con la “boca abierta”.

Por todos rincones “los carros”: manzanas, cocos y chufas con su chorrillo de agua, acompañada de las tradicionales “flores” o “palomitas”, martillos, muñecas y pistolas; y, como no, el niño o la niña llorando y tirando del brazo de su padre pidiéndole alguna cosilla. Y para todos los niños “el día grande”, ¡el día del niño!, o de los padres, donde todos disfrutábamos ilimitadamente de montarnos donde queríamos, un día de ensueño. ¡No saben igual que en la Feria de Baza!, son los pintorescos pinchos morunos y su tradicional oferta: “Pincho y cerveza: 100 pesetas”, no hace tanto, que los degustábamos en la Avenida Andalucía. Siempre, antes y ahora, la Feria de Baza la entendemos y la disfrutamos con un helado, pero no con cualquier helado, siempre con un helado de “Los Valencianos”, cucurucho, tarrina o  polo de limón.

Mis primeros conciertos en la Alcazaba. El primero que estuve pero que no disfruté, y del que todos nos acordamos, “Hombres G”, “Celtas Cortos”, “Los Inhumanos” vestidos todos con túnicas blancas, “No me pises que llevo chanclas” (¿Y tú de quien eres?), Víctor Manuel y Ana Belén y el frío que hacía, Loquillo y su botella de Jack Daniels, Joaquín Sabina, Miguel Ríos y “sus palmas pueblerinas”… y los eternos teloneros pero insustituibles “Ecce Homo”.

La caseta municipal y la infantil con sus chapas verdes, su escenario, y las orquestas deleitando  a los bastetanos y visitantes noche tras noche. ¡Baile y música durante 10 días, 10 noches!,  acompañada de importantes actuaciones donde no faltaban los tradicionales Coros y Danzas de Baza en sus inicios. No se me olvida el año que actuó en Baza el “Pulga y el Linterna”, los que salían en la tele; y es que a Baza siempre venían “los mejores artistas y de actualidad”. No nos perdíamos nada y para ello estaba la labor del “Boletín de Noticias de Baza”, en su número extraordinario, en su especial “Feria y Fiestas”, con las Damas y Reinas de las Fiestas, con la  programación diaria, conciertos musicales, teatro… Sin faltar el campeonato de ajedrez, brisca, subastao o el tiro al plato,  el torneo de tenis Cid Hiaya , seguido de un largo etcétera.

 Y es que la Feria de Baza siempre ha sido importante y grande, la más grande. Ha tenido y tiene un color y un sabor especial, distinto al resto. La más grande también por su plaza, por sus festejos taurinos, por sus corridas de toros, o de rejoneo, o por sus ya desaparecidas charlotadas. ¡Grande por su gente, los bastetanos!

Y todo, por ella. Una Feria y Fiestas en honor a la Virgen de la Piedad, Patrona de Baza. “¡Y no se la lleva!, ¡y no se la lleva!”…, así empieza año tras año la Feria con la llegada del Cascamorras al Templo de la Merced.  Antes, con menos gente, ahora multitudinaria y declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional,  pero siempre con la misma intensidad. Y el día grande, el día 8, con las carrozas, los “gigantes y cabezudos” en la Plaza de San Francisco y las calles abarrotadas. Por la tarde, la procesión en honor a la más grande de nuestras reinas, la Virgen de la Piedad, con decenas de fieles tras su trono, hablando con ella y haciéndola partícipe de su vida más íntima.

Han pasado los años, lo que antes vivíamos como niños, como jóvenes, ahora lo disfrutamos ya como padres. Distinta ubicación, distintos escenarios, pero el mismo sentir, el de compartir unos momentos inolvidables con los nuestros y el de trasmitirle nuestras tradiciones. Debemos disfrutarla y hacerla grande, saliendo a la calle y olvidándonos por unos días, por unas horas, de nuestros problemas. La Feria de Baza crece y crecerá año a año gracias a los Bastetanos y a los que nos visitan, superando siempre las adversidades.

¡Os deséo una Feliz Feria y Fiestas 2012 y que sepamos disfrutarla con pasión y devoción!