PLAZA MAYOR

Una sección de Francisco Arias
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VENDER LA MOTO

El pasado domingo, a media mañana, veía yo a grupos de cordobeses paseando por nuestra ciudad con miradas expectantes, como de querer enterarse de todo. Lo de cordobeses estaba claro, pues llevaban la bufanda del Córdoba C.F., que esa tarde jugaba con el Baza. Así que, como suele ocurrir, aprovecharon el viaje para “turistear” un poco por nuestra ciudad. Ya sé que la palabra “turistear” no está en el diccionario, pero me tomo la licencia de usarla porque, realmente responde a un modo muy particular de pasear que creo que todos entendemos. Se trata de ese caminar diligente por pueblos y ciudades desconocidas con el afán de ver y conocer cuantas más cosas mejor. Y las personas que turistean generalmente lo hacen con una gran benevolencia, dispuestos a valorar casi todo lo que encuentran a su paso, sin profundos análisis ni demasiadas exigencias.

Así que, viendo a esta gente, pensaba yo para mis adentros sobre la impresión que les causaría la vista de nuestras calles y plazas, ya que monumentos no podrían visitar ninguno, como es de suponer. También es verdad que cuando se “turistea” sin mucho tiempo, no se suele uno detener demasiado en museos y monumentos; lo normal es conocer las ciudades por fuera, sus calles y rincones típicos, hacer unas fotos, tapear y poco más. Por lo tanto, algo que sí destaca mucho en esos momentos es el ornato y la limpieza de los lugares que se visitan. Precisamente por eso me preguntaba sobre la impresión de los turistas, en este caso cordobeses, que paseaban por nuestras calles.

Tenemos que ser conscientes de que Baza tiene mucho más atractivo del que algunos bastetanos suponen. Ya sabemos que, actualmente, no es una ciudad monumental de primera categoría. Podía haberlo sido si se hubiera conservado, mantenido y rehabilitado convenientemente, pero, por desgracia, no ha sido ese el caso. No obstante, reúne suficientes encantos y elementos de interés para sorprender favorablemente a propios y extraños, aunque los propios estamos tan habituados que, a veces, no nos damos cuenta.

Sin embargo, ocurre también que, cuando las cosas no están bien presentadas, se oscurece su valor. Y eso sí que es evidente: Baza deja mucho que desear en cuestión de ornato y, sobre todo, de limpieza. Es cierto que algo se ha mejorado, pero hace falta mejorar mucho más. No se trata de hacer una crítica a ultranza; tampoco se trata de buscar culpables, ya que lo más importante en estos casos es buscar soluciones y llevarlas a la práctica lo antes posible. Además, ese aire de descuido y despreocupación urbanística no es algo nuevo en nuestra ciudad, si no que nos acompaña desde tiempos muy lejanos.

Precisamente, hace unos días, nuestra ciudad fue, al parecer, muy bien promocionada en FITUR; allí se presentaron los principales atractivos y las muchas posibilidades que Baza y comarca pueden ofrecer a sus visitantes. Hay que tener en cuenta que el turismo ha de ser un pilar básico para nuestro desarrollo; así pues, como coloquialmente se dice, es imprescindible “vender muy bien la moto”. Y, por consiguiente, hay algo muy importante que no debemos olvidar: cualquier persona que quiere vender una moto, un coche o cualquier otro vehículo, lo primero que hace es darle un buen repaso y, sobre todo, un buen fregado. Vaya, que, con un repasillo y un buen lavado de cara, las cosas se quedan como nuevas. Y eso es justamente lo que yo creo que le falta a Baza. A lo mejor, cuando se acaben las obras y los anunciados planes de embellecimiento de barrios, conseguimos mejorar definitivamente estos aspectos. Es posible, pero considero que, difícilmente se logrará el objetivo si no nos concienciamos de que la limpieza y el cuidado de nuestras calles es labor de todos y no sólo del Ayuntamiento, aunque en él recaiga, lógicamente, la principal responsabilidad.

Por cierto que, también en FITUR, se ha promocionado la Semana Santa bastetana y se ha presentado el cartel de este año. No está mal, a pesar de que se haya dado a conocer el cartel a todo el mundo antes que a los bastetanos. A ver si eso nos sirve de estímulo para que entre todos arropemos nuestra Semana Mayor, que reúne innumerables valores y aspectos positivos y que, tengo la impresión de que no recibe la acogida que merece por parte de los bastetanos. Sé que alguien, a quien no le gusta que se hable en negativo de este tema, me va a acusar de derrotista, pero lo digo como lo siento: nuestra Semana Santa tiene unas características merecedoras de un mayor interés y atención de nuestra gente. Pero qué le vamos a hacer, esto es lo que hay. De todos modos, es cierto que en los últimos años estamos asistiendo a un resurgir de la Semana Santa en nuestra ciudad; lo que hace falta es que los bastetanos nos impliquemos un poco más en éste y en todos los actos y manifestaciones culturales de Baza. Al igual que tenemos que esforzarnos para que la ciudad esté siempre limpia y presentable, que resulte llamativa y acogedora, que sea una ciudad viva y dinámica. Aunque es importante pedir y exigir a la Administración, no hay que olvidar que nosotros debemos ser los primeros en participar y en dinamizar nuestro propio desarrollo. Vaya, que la moto es nuestra y entre todos tenemos que preocuparnos de tenerla en buen estado y de que resulte lo más atractiva posible; si la moto está mal cuidada y sucia, y, encima no arranca, la vamos a vender pasado mañana.

Ah, se me olvidaba; no tuve la ocasión de sondear la impresión de los turistas cordobeses; pero, entre el regular aspecto de nuestra ciudad y el resultado del partido, supongo se marcharían con un sabor agridulce. El resultado deportivo, mejorable; la imagen de la ciudad, también.