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Una sección de Sebastián Manuel Gallego Morales

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Mazas y Maceros

Artículo publicado en la sección Memoria y opinión de la publicación El Norte, en la primera quincena de octubre de 2008

Los maceros, como personas que llevan la maza delante de algún mandatario o de una procesión, han existido desde tiempos remotos. En definitiva, servían y toda vía se puede decir que sirven, para abrir el paso a las personalidades entre la muchedumbre. Lo que sí es seguro es que representaban en todo momento la autoridad y el protocolo; las personalidades, dignatarios o corporación, se anunciaban mediante un heraldo y siempre iban acompañados en su salida pública en medio de dos maceros, que por un lado evitaban la aglomeración del público curioso ante ellos, y por otra, daban el empaque y majestuosidad debida al cargo. Por todo ello, cuando se pretende dar solemnidad a un acto corporativo, se dice que se mostrará “ bajo mazas”, es decir, con toda la parafernalia que el protocolo permite.

La imagen de los maceros con sus mazas al hombro, es habitual en las representaciones pictóricas, en la que aparecen reyes, dignidades y nobles en actos públicos, procesiones, exposiciones públicas, etc. Posteriormente, este tratamiento pasaría también a realizarse con las autoridades del municipio.

En nuestra ciudad, los maceros han debido existir desde tiempos remotos, aunque datos concretos sobre los mismos, sólo los he encuentrado en un acta de 1755, año del terrible terremoto que sufrió toda la comarca y nuestra ciudad en el día de Todos los Santos. El pueblo de Baza se encomendó a su Santa Patrona Santa Bárbara y no hubo víctimas mortales.

Tras el terremoto, el Cabildo municipal decidió hacerse con una nueva imagen de la Santa Patrona, que se conservaba en el Consistorio, y ante la cual el primer día de cada año se celebraba la misa de Espíritu Santo. En la preparación de este acontecimiento queda reflejado, al parecer por unánime acuerdo de los gobernantes, que para el acto solemnísimo de la recepción pública de la nueva imagen de la Patrona de Baza, las mazas están “indecentes”. Así consta en el texto original: “Así mismo se hizo en este Cabildo presente por el señor Alcalde Mayor de la ciudad, la necesidad que tiene el Ayuntamiento de ella de usar 'mazas de plata', supuesta la indecencia de las que hay de 'hierro', no correspondientes a las circunstancias de la Muy Ilustre Ciudad”.

Para justificar el gasto, que era el principal escollo que había que superar para reponer el material, se expone en la referida acta que existen unas sanciones a varios vecinos de Caniles, condenados por corte de leñas, y que dichas cantidades importan entre 900 y 1.000 reales, unas cantidades que difieren poco de lo que supondría hacer otras mazas, en este caso de material noble, de plata. Eso sí, siempre que la ciudad estime que se ha de destinar la sanción a dicho fin. Contemplando esta posibilidad, ya se había formado un diseño en madera, que se manifestó y expuso a examen a los ediles. Finalmente, el acuerdo de la ciudad fue el siguiente: “que se hagan otras mazas con arreglo al diseño presentado y que para ello se formen en un regular tamaño las almas de madera, por don Chrisanto Romero, para que después se vistan de plata”. Hay en un acta posterior, correcciones en cuanto al costo y también lo que importaron los ropones, zapatos, medias y gorros de los maceros que hubieron de ser todos adquiridos para estar en consonancia con las mazas de plata adquiridas.


Hace muy pocos días, en la celebración "solemne" de la procesión de la Virgen de la Piedad, he visto los clásicos maceros con sus ropones, zapatos, medias y gorros, pero en este caso a los que acompañaban a la corporación municipal de Guadix.

En el caso de nuestra corporación, a continuación en la comitiva, aunque iba acompañada de "maceros", por ir en acto público solemne, estos se mostraban con ropas modernas. Francamente, se nos está yendo la historia, el empaque y la solemnidad de estos personajes. Esperemos tiempos mejores, en los que se puedan comprar ropones, zapatos, medias y gorros, para ir en consonancia con nuestras mazas de plata.

Muchos años en el Corpus de Granada.

Han sido en todo tiempo los “maceros de Baza” personas que le han dado prestancia y dignidad al cargo, siendo casi siempre los “porteros” del Ayuntamiento, quienes las han portado. Tanto ha llegado a ser el relumbre de estos cargos, que durante los años 1940-1960, era solicitado a nuestro Ayuntamiento que “para darle mas dignidad y empaque a la procesión del Corpus Granadino, se desplazase a la citada ciudad, el pendón de la ciudad custodiado por los maceros”. Así lo hicieron durante bastantes años, viajando hasta Granada para salir en la principal procesión de esta capital. Así fue durante años. No obstante, en una sesión plenaria municipal en Baza, varios concejales  se opusieron a esta costumbre “alegando” que el Pendón bastetano no debería salir de nuestra ciudad; que en todo caso, formara parte de la procesión del Corpus, pero en la que se celebraba en nuestras calles. Y así se vino haciendo bastantes años, hasta la desaparición de esta fiesta religiosa del Corpus en Baza. (1)

  1. Nota del webmaster: La fiesta del Corpus se celebra actualmente el domingo siguiente al del jueves en que tiene lugar la fiesta en el calendario religioso y, a la procesión de Baza, acude la Corporación Municipal, en pleno y bajo mazas.