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Una sección de Sebastián Manuel Gallego Morales

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Antonio del Rey y Caballero, Hijo Adoptivo de Baza

Artículo publicado originalmente en la sección "Honores y distinciones" de la Revista "El Norte", correspondiente a la primera quincena de abril de 2013 


La primera persona que aparece con alguno de estos galardones, en concreto como Hijo Adoptivo de Baza, en los libros de historia local, en don Antonio del Rey y Caballero, en el sigo XIX. Nacido en Valladolid el 10 de junio de 1814, fue un gran político y militar, héroe de la Primera Guerra Carlista. Teniente General del ejército, llegó a Ministro de la Guerra, Presidente del Consejo Supremo de Guerra y Marina.

Antonio del Rey tuvo una larga actuación desde su ingreso como Teniente de Milicias en el ejército, pasando por el regimiento de Granaderos y el de la Guardia Real de Infantería. Tomó parte en las más difíciles operaciones militares de la primera Guerra Carlista, a las órdenes del general Espartero, y tras la batalla de Peñacerrada fue compensado con la Cruz de San Fernando. Participó en la guerra contra los carlistas hasta que el general Cabrera huye a Francia. Combatió las insurrecciones ciudadanas en Cataluña y en Madrid, recibiendo los más altos honores del entonces Jefe del Gobierno General, O´Donell.

Durante los años 1869 y 1870, Antonio del Rey se hizo cargo de la Capitanía General de Granada, reconduciendo la difícil papeleta del desarme de la llamada «Milicia Ciudadana» sin incidente alguno. Es en estas fechas cuando visita nuestra ciudad, recibiendo de la misma «como justo premio y aprecio que le profesa Baza, por sus reconocidos servicios prestados a la Nación y en defensa de la Libertad y el Orden Público, el nombramiento de Hijo Adoptivo de Baza» (acta del Cabildo Municipal del día 8 de febrero de 1870). El de Antonio del Rey es el primer título de Hijo Adoptivo de Baza que se encuentra reseñado en las actas municipales.

Senador por la provincia de Ciudad Real en cinco legislaturas, fue condecorado con la orden de Isabel la Católica y la portuguesa Orden de Cristo, la de Carlos III, la de San Hermenegildo, y la del Mérito Militar (blanca). En el año 1872 fue nombrado Ministro de Guerra en el gabinete que presidió Práxedes Mateo Sagasta; ejerció el cargo de Director de Administración Militar, en el cual prestó excelentes servicios al Estado, y en el año 1882 fue nombrado Presidente del Consejo Supremo de Guerra y Marina, pasando unos meses después a la escala de reserva. Hasta su muerte, acaecida en Madrid el 6 de agosto de 1886, fue senador vitalicio.

Cuando fue elegido para la Capitanía General de Granada, era Alcalde de Baza don Domingo Sánchez Morales. En nuestra ciudad se habían formado los Batallones Revolucionarios, perfectamente armados. Estaban bajo la dirección de don Restituto Gutiérrez de Ceballos, político eficaz y revolucionario con gran ascendente en la población. Esta milicia armada la formaban cuatro secciones, que estaban al mando de don Emilio Serrano, don Juan Bautista Casas, don Juan Ortiz Sánchez y don Torcuato Aguilera. El tacto y la habilitad de don Antonio del Rey evitó un enfrentamiento armado y el derramamiento de sangre en la ciudad, deponiendo armas y disolviéndose las Milicias Ciudadanas. Los soldados confraternizaron como hermanos.