ÚLTIMA PÁGINA

Una sección de Sebastián Manuel Gallego Morales

Para remitir sus comentarios, clique AQUÍ

Práxedes Mateo Sagasta y Escolar, Hijo Adoptivo de Baza

Artículo publicado originalmente en la sección "Honores y distinciones" de la Revista "El Norte", correspondiente a la segunda quincena de abril de 2013 


Este gran político español del siglo XIX nació en Torrecilla de Cameros, La Rioja, en el año 1825. Tras estudiar en la Escuela de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos y conseguir la carrera, fue destinado a la Jefatura de Obras Públicas de Zamora, donde realizó la construcción de la carretera que une Zamora y Orense. Posteriormente le es encargado el proyecto del trazado del ferrocarril de Valladolid a Burgos. Ya en estas fechas inicia sus contactos con los políticos de la época. Con solo 32 años fue nombrado profesor-ingeniero de la Escuela de Ayudantes de Obras Públicas, desempeñando la docencia durante nueve años.

Comprometido por su ideario, pasa a ser presidente de la Junta Revolucionaria de Zamora. En el año 1854 es elegido Diputado de las Cortes Constituyentes, cargo para el que sería reelegido en 1863. Obligado al exilio, tras ser cesado como profesor, y separado del Cuerpo de Ingenieros de Caminos, a partir de 1868 pasa a dedicarse por completo a la actividad política.

Práxedes Mateo Sagasta fue la figura principal del Partido Progresista. Todos sus esfuerzos de concentran en derrotar al conservador partido de Narváez. Con la compra del periódico «La Iberia» inició una interesante actividad editorial; este periódico se convirtió en el órgano de expresión de su partido, ahora llamado liberal-progresista. Colaborador en las actividades revolucionarias del general Prim para derrocar a Isabel II, logra su destronamiento y la llegada del llamado sexenio revolucionario.

Práxedes Mateo Sagasta, Hijo Adoptivo de Baza.

Tras el asesinato de Prim, en el reinado de Amadeo de Saboya, Sagasta constituye el Partido Constitucional (1871), siendo nombrado Presidente del Consejo de Ministros, cargo para el que fue reelegido en varias ocasiones hasta finales del año 1874, en el que se reinstala la monarquía Borbónica con Alfonso XII.

Repuestos los Borbones en la Corona de España, funda, en el año 1880, el partido Liberal, que junto al Partido Conservador de Cánovas del Castillo, constituye el sistema bipartidista de alternancia en el gobierno que caracterizó la Restauración española durante el tramo final del siglo XIX y la primera parte del siglo XX. Durante este periodo de alternancia bipartidista, Sagasta presidió el gobierno en cinco ocasiones. En el año 1885, Sagasta firmó con Cánovas del Castillo el llamado Pacto de El Pardo, por el que se garantizaba la continuación de la monarquía española, ya que la Reina Regente, María Cristina, estaba embarazada del futuro Rey Alfonso XIII. Este juego de partidos en el poder se prolongó hasta el año 1909, aún cuando Sagasta muere en Madrid en el día 5 de enero de 1903.

Este insigne político nacional recibió, entre otros muchos honores y distinciones durante su larga vida, los siguientes: Orden del Toisón de Oro, Orden de Caballería del Santo Sepulcro de Jerusalén, Orden de Carlos III, Orden de la Torre y Espada, Orden de San Mauricio y San Lázaro, etc. Fue masón y llegó al grado 33, Gran Maestre del Oriente de España. No obstante, en un momento de su vida manifestó públicamente su renuncia a la masonería en defensa de sus creencias personales y a favor de la monarquía.

E s en el día 14 de enero del año 1886 cuando, a propuesta del Alcalde de Baza, don Francisco de Paula Morcillo Fernández, y tras hacer éste un encendido elogio de las virtudes del eminente patricio don Práxedes Mateo Sagasta, del reconocimiento de los servicios prestados a la Patria, así como a la causa del Orden y de la verdadera y bien entendida Libertad, el alcalde propone a la Corporación: «DECLARAR HIJO ADOPTIVO de esta Muy Noble y Leal ciudad, asiento que fue de Reyes, Patria esclarecida de ínclitos Prelados, de renombrados Capitanes y Sabios que le dieron gloria y fama imperecedera, Corto premio justamente debido a la gratitud y general aprecio que le profesa la totalidad de sus habitantes, por sus reconocidos servicios prestados a la Nación». El acuerdo fue adoptado por la corporación municipal por unanimidad y con una clamorosa aclamación, acordándose que se librara certificación literal de este acuerdo y se remitiera a S.E. a través del Diputado en Cortes, lo que así se hizo.