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Una sección de Sebastián Manuel Gallego Morales

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Jesús Domínguez Valdivieso
Alcalde Honorífico Vitalicio

Artículo publicado originalmente en la sección "Honores y distinciones" de la Revista "El Norte", correspondiente a la primera quincena de noviembre de 2013 


En el acta municipal del Ayuntamiento de Baza del día 30 de marzo de 1967, a propuesta del recientemente designado alcalde de la ciudad, Fernando Martos Mateos, queda reflejado cómo le es concedido a Jesús Domínguez Valdivieso, que acaba de dejar su puesto al frente de dicha alcaldía, el título de Alcalde Honorario Vitalicio. Era la primera vez que se otorgaba por la Corporación Municipal una distinción «vitalicia», un privilegio que finalizó con el fallecimiento de su titular, ocurrido el 23 de febrero de 1973 en la misma ciudad bastetana que le vio nacer el 4 de enero de 1895.

Jesús Domínguez fue el primer hijo del matrimonio formado por el industrial oriundo de Logroño, Hilario Domínguez Fernández, y la bastetana Encarnación Valdivieso, un hogar al que vendrían después otros hijos: Ana, José, Hilario y Vicente. Afiliado desde joven al Partido Unión Patriótica, de tendencia conservadora, que había fundado el General Primo de Rivera, se inscribe en las listas electorales saliendo elegido como concejal, una lista en la que también figura Servando Segura Fernández, que sería designado alcalde de Baza el 8 de febrero de 1924.

Llegados los días del Directorio Militar de Primo de Rivera, Jesús Domínguez es nombrado alcalde, sustituyendo al referido Servando Segura. Se mantuvo en el cargo hasta el 29 de marzo de 1930, fecha en la que ocupa el puesto Francisco La Iglesia Santaolalla. De este, su primer mandato como alcalde, se recuerdan hechos tan fundamentales para esta ciudad como la traída de aguas potables bajo tubería hasta los depósitos conocidos como «spotornos», en la Mancoba, la Casa Cuartel de la Guardia Civil, en la carretera de Caniles, y el edificio de los Juzgados, en la carretera de Granada.

Tras unos años alejado de la política, que no del servicio a la ciudad como Presidente de la Hermandad de Labrados, es llamado por el Gobierno Civil para sustituir a Antonio Navarro Santaolalla, que, siendo alcalde, había abandonado la ciudad y dejado al frente del Ayuntamiento a Sergio Navarro Pinillos, como alcalde accidental, por ser primer teniente de alcalde en la corporación.

Jesús Domínguez Valdivieso.

No obstante, fue en el año 1956 cuando es llamado nuevamente a la política municipal y durante un periodo más largo. Tomó posesión como alcalde el día 13 de abril de ese año. Este segundo mandato estuvo repleto de realizaciones. Se inauguraron el grupo de viviendas Matías Montero en el Llano del Ángel (1956), los grupos de viviendas Mártires de la Cruzada y Javier Molina (1958). En 1959 cursó invitación al ayuntamiento de Guadix para que, junto al de esta ciudad, presidieran la procesión de la Virgen de la Piedad el 8 de septiembre, ofrecimiento que fue aceptado con lo que se iniciaba una tradición que aún perdura en la actualidad. Jesús Domínguez fue el creador de los premios Pío XII a los mejores expedientes académicos para estudiantes hijos de la ciudad. Bajo su mandato se erigió el monumento a la Inmaculada en el Arco de la Magdalena. Tras ceder un solar en la conocida como Huerta de San Antón a la Inspección de Enseñanza Primaria, se inauguran los grupos escolares «Márquez Torres», «Álvarez Lara», «Virgen de la Piedad» (calle Ángel) y «Santa Bárbara» (plaza de toros). Así mismo se iniciaron las obras del grupo de viviendas de «La Victoria» y las de Hermanos López de Hierro. El año 1961 finalizaba con la distinción como Hijas Adoptivas de esta ciudad a Sor Matilde y Sor Florencia, Hermanas de Ancianos Desamparados, así como la concesión de una calle a cada una de ellas y la petición de Medalla de Beneficencia para ambas (14 de septiembre). Jesús Domínguez recibió la prestigiosa Orden de Cisneros el 20 de agosto de 1962.

Estos son los años en los que llega a nuestra ciudad el Plan Social de Cáritas. El Ayuntamiento dirigido por Domínguez colabora con esta institución en todo lo posible, en las obras de sus edificios, en la construcción de los dos puentes de la zona de Las Cuevas, así como en cuestiones tan necesarias como el matadero y el mercado de ganados. A propuesta del alcalde, la Corporación Municipal acordó, el 13 de julio de 1962, declarar Hijo Adoptivo de Baza a Ángel Casas, notario de la ciudad durante muchos años y comisario de excavaciones arqueológicas.

Además del honorífico nombramiento que le trae a estas páginas, Jesús Domínguez recibió la Medalla de Bronce de la Juventud. Tras su fallecimiento, una calle de la ciudad recibió su nombre, homenaje que aún perdura en la calle que une la prolongación de Corredera con la calle Monjas. Es el segundo alcalde de Baza que tiene el privilegio de poseer una calle. También Gumersindo Ruíz Ruíz puso su nombre en la actual calle Cabeza. Jesús Domínguez estuvo casado con Clementa Fernández-Luna, un matrimonio que no tuvo descendencia.

Jesús Domínguez consiguió que la Dirección General de Patrimonio del Estado le cediera al municipio el edificio de la Prisión Provincial, que hoy día sigue siendo cuartel de la policía local (1964). En este mismo sentido, en 1965, obtiene la concesión de una Biblioteca Municipal para la ciudad, así como la declaración como Monumento de Interés Artístico para el Palacio de los Enríquez.

Acuciado por la enfermedad, Jesús Domínguez había solicitado en varias ocasiones el relevo en el cargo, petición que le es concedida el 11 de octubre de 1966, entregando el bastón de mando de la ciudad a Fernando Martos Mateos, designado para tal cargo por el Gobierno Civil de la Provincia.