Lunes 10 de abril de 2023

La revisión del Censo Electoral se podrá realizar del 10 al 17 de abril, periodo en el que también se podrán hacer alegaciones en caso de errores. Del 10 al 17 de abril se mantendrá abierto el periodo para que cualquier ciudadano/a consulte su correcta inscripción en el censo electoral correspondiente, periodo en el que también se podrán hacer las alegaciones pertinentes en caso de que exista algún error.

A través de este censo cualquier persona podrá saber exactamente dónde vota en las próximas elecciones municipales de mayo. Se recomienda su revisión para comprobar que la información personal es la correcta, especialmente para aquellas personas que hayan cambiado recientemente su empadronamiento, así como para extranjeros/as que se hayan inscrito recientemente en el censo municipal.

Las consultas se pueden realizar en el propio Ayuntamiento de Baza, Oficina de Estadística, o bien online con certificado digital a través de la página web del INE, sección Censo Electoral:

https://sede.ine.gob.es/ss/Satellite?c=SETramite_C&cid=1254734728608&lang=es_ES&p=1254734719739&pagename=SedeElectronica%2FSELayout

 

El presidente del Partido Popular andaluz visitaba Baza el pasado Jueves Santo en la que fue una intensa jornada dedicada al mundo cofrade. El presidente del PP de Andalucía, Juanma Moreno, visitaba Baza el pasado 6 de abril, donde llegó realizó una visita a varias hermandades y cofradías de nuestra ciudad, acompañado de la recién nombrada Consejera de Fomento, Rocío Díaz, el delegado de la Junta en Granada, Antonio Jesús Granados o el presidente provincial del PP, Francisco Rodríguez, todos ellos en su condición de miembros del Partido Popular de Andalucía, pues la visita no tenía carácter institucional.

Además del recorrido que Moreno hizo por las iglesias y casas de hermandad de Baza, la intención pasaba por mostrar su apoyo al candidato de su partido para las próximas elecciones municipales, Pedro J. Ramos, quien acompañó en todo momento a su presidente autonómico, junto a otros miembros y algunos simpatizantes del PP bastetano.

La visita de Juanma Moreno se llevó a cabo con un notable retraso y se iniciaba en la Iglesia de Santiago, donde era recibido por el Obispo de la diócesis de Guadix-Baza, Francisco J. Orozco, y el clero local. Seguidamente giró visita a la Iglesia Mayor, la Iglesia de la Merced y las casas de hermandad de la virgen de la Esperanza y de Jesús Nazareno, compartiendo impresiones con las diferentes Juntas de Gobierno y realizando una levantá con las costaleras del paso del Descendimiento en la Iglesia de Santiago.

En las tres iglesias del recorrido, las Juntas de Gobierno de las hermandades y cofradías de las tres parroquias esperaban ante los pasos de sus Titulares y, en todos los casos, procedieron a imponer la medalla que los representa al presidente de los populares andaluces, así como se produjo también el acto de firma en los diferentes libros de honor de la mayoría de cofradías. Además, visitó la capilla de la Virgen del Rocío en la Iglesia santiaguera y dedicó una detenida visita al camarín de la Virgen de la Piedad, de donde se llevó una reproducción de la patrona bastetana sobre la que comentó que la colocaría en lugar visible en el Palacio de San Telmo, a fin de recordar esta visita y que quienes la vean allí se interesen por la patrona bastetana.

Con posterioridad a su estancia en los tres templos, Moreno visitó las dos casas de hermandad citadas y, en todos los casos, se interesó por las imágenes y su historia, así como por la vida y actos del mundo cofrade bastetano, tras lo que acudió a la comida que se celebró en el céntrico restaurante “7 Monjas” de nuestra ciudad.

Además, Moreno mantuvo un pequeño encuentro con los medios de comunicación, el cual comenzó lamentando el fallecimiento del político catalán Josep Piqué, quien ocupó varias carteras ministeriales durante la época de Aznar y a quien Moreno calificó como un político afable, moderado y tolerante, con el que coincidió durante su época de secretario de Estado.

En referencia a la situación del turismo en Andalucía durante la Semana Santa, Moreno comentó que “Andalucía va muy bien” y que se estaba superando el 80%, con las provincias de Málaga y Cádiz por encima de esa cifra y con datos que para jueves y viernes se esperaba que superasen todas las expectativas y que sirvan para que vuelvan a repetir quienes visitan Andalucía en estas fechas.

Moreno ensalzó la capacidad monumental de Baza, su Historia y cuanto supone esta ciudad, con una bella Semana Santa, llamando la atención sobre el hecho de que siempre se habla de lo que ocurre en las capitales de provincia, si bien Andalucía tiene “muchas Semanas Santas en el interior que merecen la pena ser visitadas y que son maravillosas”, animando “a los visitantes y a los andaluces a que conozcan esta maravilla que es Baza”.

Por último se refirió a las elecciones municipales de las que confía en recibir la confianza de los ciudadanos y que, en el caso de Baza, está convencido que Pedro será un buen alcalde, pues está trabajando con honestidad, junto con su equipo y con un proyecto muy interesante.

 

La cofradía del Nazareno hizo brillar la tarde del Jueves Santo con una impresionante procesión. A las siete de la tarde del Jueves Santo se ponía en marcha la comitiva que partía de la Iglesia de San Juan, para dirigirse a su casa de hermandad en la Cava Alta, donde uno de sus hermanos más antiguos golpeaba el portón para pedir paso a la Cofradía del Nazareno.

Baza vivía una tarde espléndida y los bastetanos se habían echado a las calles, con muchas ganas de procesiones y dispuestos a seguir a los diferentes cortejos que ocuparían las calles de la ciudad en la tarde del Jueves Santo. Una situación que no puso fácil el acceso a esta comitiva y que dejó ver después la gran cantidad de personas que esperaban esta salida y ocupaban las calles del recorrido.

Al abrirse las puertas, entre el incienso se dejaba adivinar, primero, y ver después, el frontal del paso que presentaba la novedad de haber empezado un proceso de dorado con el que continúa el proyecto del nuevo trono, junto al que estaba la Virgen de la Victoria que permanecería sin moverse durante la salida del Nazareno a las calles de la ciudad.

Nada más completarse la comitiva, la sorpresa se hacía evidente entre los espectadores que contemplaban esta procesión, en la que el número de penitentes era notablemente superior a lo acostumbrado en otras ocasiones y, seguramente, fruto del trabajo realizado por la Junta de Gobierno y el mayor acercamiento y participación de los hermanos.

Con todo eso, y acompañados de un gran grupo de costaleros y costaleras, el éxito estaba asegurado y su recorrido se realizó con el reconocimiento del público bastetano, que pudo contemplar una procesión seria y ordenada en la que relucía de forma especial la bella talla de un Jesús Nazareno que cada año cobra vida en la tarde del Jueves Santo.

 

Importante evolución a mejor de la Cofradía de la Esperanza y Cristo del Amor en su procesión del Jueves Santo. Apenas acabados los últimos sones de la salida del Nazareno, se escuchaba ya la salida de la Cofradía de la Esperanza, también desde su casa de hermandad situada junto a la iglesia de San Juan, en la que tiene su sede.

Una cofradía que repetía salida procesional, tras procesionar el Domingo de Ramos a Jesús de la Paz, y que esta vez lo hacía con dos pasos y las imágenes del Cristo del Amor y la Virgen de la Esperanza, acompañados de un número de hermanos que este año se ha incrementado también de manera notable y que conformaban un bonito cortejo.

Magnífico trabajo también el de sus costaleros y costaleras, muchos de los cuales han asistido a los ensayos previos a la Semana Santa y supieron mover los pasos con especial elegancia, despertando el aplauso de los espectadores en numerosas ocasiones.

En su retorno a su casa de hermandad, se recuperó un encuentro que hacía tiempo que no se llevaba a cabo entre Esperanza y Nazareno y que tuvo lugar a la altura de la Cruz de los Caídos, cuando la cofradía nazarena completaba su recorrido por las calles interiores de su barrio y la comitiva de la Esperanza y el Cristo del Amor retornaba tras su paso por la tribuna oficial e iba camino de su encierro.

Fue un momento de especial emoción y brillantez, tras el que ambas comitivas enfilaron el camino que los llevaba a sus respectivas casas de hermandad, con la satisfacción de haber realizado una salida procesional muy digna y del agrado de los bastetanos.

 

La Cofradía del Cristo de los Méndez volvió a recordar la “leyenda del madero” en la madrugada del Jueves al Viernes Santo. La madrugada del Jueves Santo bastetano tiene un nombre por excelencia y no es otro que el del Cristo de los Méndez, una imponente y bellísima imagen cuyo porte corre a cargo de un grupo de horquilleros en los que este año se pudo apreciar que el relevo generacional funciona y que no faltan los jóvenes que porten sobre sus hombros a su Titular.

Llegadas las once de la noche, se abre el portón de la Iglesia Mayor y allí aparecen la silueta del admirado Cristo crucificado, en una zona de penumbra alumbrada por las antorchas y que deja ver cómo se van dibujando la imagen de la cruz y el Crucificado sobre la fachada que diseñara Alonso de Covarrubias, dando origen a unos momentos impresionantes.

Una salida que se hace en la oscuridad de la noche bastetana, lo que le confiere un ambiente especial, en el que sentimientos y sensaciones cobran un vigor renovado ante el paso de esta imagen que año tras año se acerca hasta el callejón de Méndez para ser mudo testigo de, impresionante momento en el que se rememora la “leyenda del madero”.

Y antes de llegar hasta ahí, un recorrido diferente por las calles de Baza, que los lleva a abandonar el itinerario tradicional, algo que han modificado en varias ocasiones, para adentrarse por las calles Enrique Enríquez, Rubén Darío, José de Mora y Plaza de San Francisco, gustando y gustándose en una salida procesional que finaliza con la misma seriedad y rigor que la caracteriza a lo largo de todo el recorrido, en una emocionante subida por la rampa que da acceso a la Colegiata.

 

El Cristo del Descendimiento y la Virgen de los Dolores de Santiago estrenaron recorrido en la mañana del Viernes Santo, dejando notar su ausencia en La Alameda. No es fácil sacar una procesión el Lunes Santo y repetir tres días más tarde con un nuevo cortejo, esta vez con dos pasos, cargados por costaleros y costaleras y uno de ellos a costal. Una situación que acabó originando una modificación en el itinerario previsto, por la que llegados al final de la calle Alhóndiga, la procesión se dirigía hacia calle Alamillos, sin realizar el tramo del itinerario que pasaba por la Carrera de Palacio y el paseo central de La Alameda, antes de dirigirse de nuevo a Caños Dorados, para seguir por Alamillos.

Un cambio que acabó resultando desconocido, pero comprendido, para una buena parte del gran público y que no restó ni un ápice de trascendencia al desarrollo de una de las procesiones más esperadas de la Semana Santa bastetana, la cual acabó llegando a su iglesia en torno a la hora prevista.

A destacar el cambio de itinerario realizado en esta ocasión, prescindiendo del retorno por la calle Agua y, llegados al cruce del carril, enfilar por la Plaza de San Francisco para girar hacia Fueros de Baza, seguir por la Urbanización el Nogal y dirigirse por la calle Hiladores hasta su sede en la Iglesia de Santiago.

Un recorrido en el que destacó la gran presencia de público y en el que el cortejo iba acompañado por dos buenas bandas que contribuían al mejor desarrollo de una procesión que pudo verse muy digna y en la que volvía a destacar la presencia de una buena cantera de niños y niñas que, con toda seguridad, seguirán haciendo crecer la cofradía santiaguera.

 

La Hermandad Parroquial del Santísimo Cristo Yacente procesionaba en la tarde del Viernes Santo. Una Hermandad que está dirigida por gente muy joven y que realizan un gran esfuerzo para seguir adelante con su proyecto que culmina con la salida procesional de la tarde del Viernes Santo desde la Iglesia de la Merced, después de muchos años en los que era la Cofradía de la Soledad la que se encargaba también de esta procesión.

Una procesión de la que forma parte el paso que en su día fabricara un artesano bastetano de la talla de Esteban Jiménez Montoya, sobre el que va el sepulcro con la imagen del Cristo Yacente que llegó a Baza procedente de Olot.

Se trata de una comitiva que estuvo encabezada por un pequeño grupo de hermanos de esta agrupación, tras el que la comitiva acoge a las representaciones de las distintas cofradías y hermandades de la ciudad y de la que forma parte también la Corporación Municipal de nuestra ciudad, bajo mazas y presidida por el alcalde Manuel Gavilán, a quien acompañaban representantes de la Policía Nacional -con el nuevo comisario de Baza-, Guardia Civil, Policía Local y Bomberos.

Es también una procesión en la que el acompañamiento musical se reduce a un grupo de música clásica instrumental, en este caso el de la Capilla Musical Santo Ángel Custodio, de Granada, después que haya dejado de hacerlo la Banda Municipal de Música de Baza, que era la que tradicionalmente lo hacía.

En todo caso, una procesión muy solemne y seria, con un recorrido que es de los más cortos que se realizan en la Semana Santa bastetana, al iniciar su retorno desde la Plaza de San Francisco hacia Carril, Tribuna Oficial y Alhóndiga, con una buena presencia de público que asiste a su paso.

 

La madrugada del Viernes Santo en Baza es el turno de la Cofradía del Silencio de Nuestra Señora de los Dolores, esta vez, también con itinerario reducido. Una cofradía que tiene su sede en la Iglesia de los Dolores, donde sus hermanos se reúnen con antelación para, provistos de los enseres precisos para su salida procesional, dirigirse a la Iglesia Mayor, donde esperan los costaleros y el paso de Ntra. Sra. de los Dolores, cuya imagen fue portada hasta allí en la tarde-noche del Viernes de Dolores, tras los cultos celebrados en su honor, en su coqueta iglesia.

El toque de las campanadas que anuncian la medianoche es el momento exacto en el que esta procesión se pone en marcha, con el único acompañamiento musical de dos tambores de ronco sonido, que permanecen callados cada vez que el paso detiene su marcha y todos los hermanos se giran para dirigir su mirada a la Virgen de los Dolores.

Una procesión que esta vez se vio obligada también a recortar su itinerario, ante un problema surgido con los ajustes del paso, lo que hacía casi imposible la misión de los costaleros que los cargan a costal, quienes hubieron de multiplicar su esfuerzo para realizar un itinerario más corto del tradicional, en una noche que estaba siendo espléndida en lo climatológico, hasta el punto de que la imagen fue iluminada constantemente por la práctica totalidad de las candelas de su paso.

Destacar también la repetida costumbre de fieles y devotos que, al paso de la Virgen, no marchan a otros lugares a verla pasar de nuevo, sino que se unen al cortejo y, situados tras el paso de la Virgen, la acompañan a lo largo de todo el recorrido por unas calles en las que es el silencio el que se oye, apenas roto por el sonido de los pasos de los costaleros y los dos tambores que encabezan el cortejo.

En cualquier caso, una procesión que no suele incorporar cambios sustanciales en su recorrido por la ciudad y que este año vio también  aumentar el número de penitentes y mantillas que acompañaban a la Virgen.

 

El Sábado Santo se celebraba en la Iglesia de la Merced el Pésame a la Virgen. La Iglesia de la Merced dedica el Sábado Santo al acto de Pésame a la Virgen que organiza la Cofradía de la Soledad y que, lejos de concentrar grandes multitudes, consiste en un encuentro íntimo con la Virgen, tras la muerte de su Hijo.

Así, ante el altar mayor se coloca a la imagen de la Virgen de la Soledad, ataviada de luto riguroso, ante la que se colocan un par de reclinatorios desde los que tener a la imagen a escasos centímetros de quienes deseen acercarse a Ella y realizar sus peticiones y oraciones, en una fecha tan señalada como el Sábado Santo.

De esta forma, la Iglesia de la Merced se convierte en lugar al que se dirige un incesante flujo de fieles que acude a la cita que este pésame supone y a la vivencia de poder encontrarse frente a frente con esta bella imagen y poder hablar con ella cual si de un simple susurro se tratara, en una situación de tanta cercanía y afinidad.

 

La Semana Santa bastetana termina con la procesión de Jesús Resucitado integrada por los más jóvenes cofrades de nuestra ciudad. Llegada la mañana del Domingo de Resurrección, numerosos niños y niñas dirigen sus pasos a la Iglesia de la Merced, desde donde partirá la procesión de Jesús Resucitado, de la que ellos son los verdaderos protagonistas.

Una procesión multicolor a la que acuden nuestros niños ataviados con el habitual vestuario de penitente de las diferentes cofradías y hermandades, aunque sin capirote, dispuestos a integrarse en las filas y ser portadores de una pequeña cruz de madera, a lo largo de todo el recorrido.

Una imagen que no siempre es tan fácil de ver, dado que hay adultos que no acaban de entender que la procesión es de los niños y niñas y no de los papás y las mamás que llevan la cruz, la botella de agua, el pañuelo… y lo que sea menester, para llegar a confundir la idea inicial de quienes son los protagonistas del cortejo.

En todo caso, una procesión viva y participativa, de la que también forman parte las túnicas de la propia cofradía del Resucitado y que tiene uno de los momentos más llamativos cuando, tras el paso por la Tribuna Oficial, todos los niños y niñas son obsequiados con un polo de la centenaria heladería de “Los Valencianos”, algo que ha llevado incluso a denominar esta procesión como la de “la cofradía del polo”, aunque solo sea un chascarrillo más.

Aun así, lo que sí es cierto es que esta procesión es la más viva expresión de una cantera que sigue alimentando a las cofradías y hermandades de los que serán los penitentes, costaleros y horquilleros que están llamados a ser el futuro de la Semana Santa bastetana.

 

Cerca de 700.000 andaluces han solicitado la ayuda de 200€ a rentas bajas de la que dispondrán en los próximos tres meses como apoyo económico a sus día a día. Un total de 692.493 andaluces han solicitado a la Agencia Tributaria la ayuda de 200 euros para mitigar los efectos de la subida de precios para personas con rentas más bajas. El plazo de solicitud de este cheque se abrió el pasado 15 de febrero, concluyendo el 31 de marzo, y ha tenido como destinatarios trabajadores, autónomos y desempleados con rentas inferiores a 27.000 euros y cuyo patrimonio –descontando la vivienda habitual– no rebase los 75.000 euros.

El delegado el Gobierno de España en Andalucía, Pedro Fernández, ha recordado que el plazo de pago por parte de la Agencia Tributaria es de tres meses a partir del cierre del plazo, “con lo que, tal y como establece el real decreto ley, los andaluces beneficiarios de esta ayuda dispondrán de este apoyo económico en el primer semestre de este año”.

Como en el caso de la anterior ayuda de 200 euros y según recoge el Real Decreto-ley 20/2022, de 27 de diciembre de medidas de respuesta a las consecuencias económicas y sociales de la Guerra de Ucrania, el objeto de este nuevo pago único es disminuir el efecto perjudicial en los precios ocasionado por la crisis energética derivada de la invasión de Ucrania en situaciones de vulnerabilidad económica no cubiertas por otras prestaciones de carácter social. Se establece, además, el requisito de que ninguno de los convivientes mencionados fuese en 2022 administrador de una sociedad activa, ni titular de acciones o participaciones no cotizadas.